El primer día de clase fue sobre ruedas. Los profesores muy majos, las asignaturas entretenidas... lo único malo según Ander son los deberes para casa jeje! Por la tarde nos dimos una buena pateada bajando poco a poco hasta el downtown, que tentación rodeados de tantas tiendas, tantos sitios guays... Tras llegar rebentados pa cenar al hostal, nos cruzamos con dos compañeros que iban a coger un ferry y ante la propuesta de unirnos... cómo rechazarla! Ya que son pocos días hay que aprovecharlos a tope.
Están genial los ferrys que van hasta Staten Island, ya que son gratis, y durante el recorrido de media hora disfrutas de unas vistas increibles de la estatua de la libertad y del puente de Brooklyn. Ha sido muy divertido.
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